Mi primera tarta, sin ceñirme a un patrón definido. Una vez me dijeron: "Cuando empieces a mezclar recetas con otras, a experimentar y a crear... ya estarás hecha una buena cocinera" jijijiji. Eso me gusta claro!!!
A ver, como primer paso está genial, pero tampoco vayamos a dramatizar porque la tarta es lo más sencillo del mundo, y creo que cualquiera lo podría haber hecho. Pero me gusta muchísimo el resultado por varias razones importantes para mí, que siempre tomo en cuenta en un postre:
- No es empalagosa
- Es muy fresquita
- Tiene fruta natural, pero no la hace "demasiado sana" (ahí, modo GULOSA)
- Tiene nata!!
- La base es muy esponjosa
- Es muy sencilla: los sabores son pocos pero bien definidos.
Vamos, una tarta muy austera, que en realidad, es lo que me gusta!!
Digamos que es la versión de fresas con nata pero con bizcocho. En casa nos gustó a todos, fue la reina de la barbacoa de la semana pasada, y todos querían repetir. Al final logré salvar un cachito para el domingo, que creo que se pone mejor.
Como os digo, es una receta muy fácil. El otro día publiqué el Bizcocho genovés como receta aparte para darle el protagonismo que se merece, y para que la tengáis para cuando la necesitéis. Como veis, es muy sencillo de hacer.
Os presento a mi Tarta!!